Gonzalo Rodríguez Aguirregoitia, presidente de Sareen Sarea, explica las claves de la Ley del Tercer Sector Social de Euskadi aprobada por el Parlamento Vasco

El presidente de Sareen Sarea, red de redes del tercer sector social vasco, de la que Gorabide forma parte a través de Fevas, celebra la reciente aprobación de la Ley del Tercer Sector Social de Euskadi que ha sido aprobada por el Parlamento Vasco con amplio consenso, y considera que aporta valor y reconocimiento a nuestras entidades.

¿Por qué es importante esta ley? 
Porque aporta la cobertura jurídica que las organizaciones del tercer sector llevamos años demandando. Tenemos diferentes formas jurídicas como asociaciones, fundaciones, etc. pero no había una ley que nos definiese como tercer sector. Ahora, queda más claro qué es y qué no es el tercer sector social. Y nos situamos como un agente importante relacionado con el bienestar y la construcción de una sociedad más inclusiva y solidaria. Y, de cara al futuro, la ley nos permite concienciar a la sociedad de nuestro papel, nos respalda en lo que hemos venido haciendo, lo que hacemos en estos momentos y lo que haremos en los próximos años.

También establece el modo de relación con las administraciones.
Sí, eleva a rango de ley lo que venía siendo práctica habitual en algunos casos. Y, además, impulsa que el tercer sector contribuya, como un agente más, en los procesos normativos, y en el diseño, ejecución y evaluación de las políticas sociales públicas. Esto es fundamental para el modelo que defendemos, porque las organizaciones trabajamos directamente con la gente o, como en el caso de asociaciones como Gorabide, el propio colectivo beneficiario de los servicios es el que gobierna la entidad. Y eso permite detectar necesidades y evaluar de primera mano las respuestas. Algo que llevamos décadas haciendo y que nos parece importante seguir aportando.

¿Y qué aporta esta ley a las familias de una asociación como Gorabide?
Esta ley favorece el desarrollo del propio tercer sector, entre otras medidas, con la implantación de una estrategia de promoción que fortalezca el tejido social, la participación social y la solidaridad organizada de la sociedad vasca. Y eso es fundamental para que movimientos asociativos como el vuestro se fortalezcan y ganen en cohesión.

¿Qué más destaca de la norma?
Sin duda, la creación del Observatorio del Tercer Sector Social de Euskadi, para la investigación y el análisis de la situación y evolución de las organizaciones y redes del sector.